De la amistad al odio, un fascinante relato acerca de la peculiar relación entre dos genios de la literatura universal.  

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Por varios años, muchos medios de comunicación han divulgado lo que parece ser un secreto a voces sobre un incidente entre Mario Vargas Llosa y Gabriel García Márquez, ocurrido en 1976 en la Ciudad de México. Se dice que el escritor peruano habría encarado a su amigo de toda la vida, al punto de golpearlo y dejarle inconsciente. Coméntanos, ¿cómo te surgió la idea de profundizar sobre este enfrentamiento entre Los genios?

Tuve la suerte de conocer a Vargas Llosa hace cuarenta años. Cuando le pregunté por qué le pegó a García Márquez, no quiso responder, dijo: que eso lo investiguen nuestros biógrafos. Años después conocí a Gabo y le pregunté por qué se peleó con Mario. Yo no me peleé con él, me respondió, en tono risueño, Mario se peleó conmigo. Enseguida añadió: Habla con mis amigos. Eso hice. Hablé con los mejores amigos de Gabo y entonces surgió la idea de escribir una novela sobre la pelea entre los genios. 

Es tan vívido el relato al punto que cuesta trabajo distinguir la realidad de la ficción. ¿Hay forma de identificar cuáles son los pasajes reales y cuáles los ficticios? 

Todo parte de hechos reales, de hechos históricos. Luego se entremezclan con los hechos ficticios que el novelista ha imaginado. Pero los pasajes más importantes de la novela ocurrieron en la vida real. Por supuesto, al hacer hablar a los genios, al hacerlos pensar, al ponerlos a pelear, interviene la fantasía del autor. Cuánto es verdad y cuánto es mentira no lo sabe ni el autor de la novela: lo que importa es que todo resulte creíble, verosímil. 

Mientras que la novela señala una amistad intensa entre Vargas Llosa y García Márquez al comienzo de sus carreras literarias cuando vivían en Barcelona, la novela va sugiriendo una creciente rivalidad entre ambos. ¿Crees que al final pudo más el celo profesional que el aprecio que entre ellos se tenían?  

No. El puñetazo de Mario a Gabo no fue por razones políticos ni por envidias literarias. Es verdad que Mario rompió con Fidel Castro y Gabo no; es verdad que Gabo vendía muchos más libros que Mario; pero estoy convencido de que Mario lo agredió porque se afiebró de celos, porque pensó que Gabo había hecho unos avances desleales con Patricia Llosa, entonces esposa de Mario. 

El libro describe dos personalidades opuestas, un extrovertido Vargas Llosa quien disfruta de los reflectores, mientras que “Gabo” sería una persona mucho más reservada. ¿Llegaste a conocerlos en persona? Si fue el caso, ¿qué tanto influyeron dichas experiencias para escribir Los genios? 

Sí. A Mario lo he conocido mucho más y lo he entrevistado. Es más vanidoso, más exhibicionista, más pavo real. A Gabo lo conocí y quedé fascinado. No quiso darme una entrevista. Era más sabio para administrar su poder, para esconderse, para no predicar políticamente todo el tiempo, lo que puede acabar siendo odioso. Era un gato astuto, sigiloso. 

Aunque resulta obvio incluir a Vargas Llosa y a García Márquez en la categoría de genios, en tus palabras, ¿por qué lo son? 

Porque ambos son inmortales. Ambos han escrito obras maestras. Ambos han ganado el Nobel. Dicho eso, ¿no es improbable que dos premios Nobel se peleen a golpes? Alguien tenía que escribir esta novela. Era mi destino escribirla. 

Un gran abrazo y muchas gracias, 

Jaime.